Porque verlos sanos, risueños y sorprendiéndonos con su ternura e inagotable curiosidad, es algo invaluable, en el Mes del Niño queremos celebrar a los más pequeños con los mejores tips de alimentación y desarrollo, para que sus risas y juegos siempre llenen nuestro hogar.
¡Cuerpo nutrido, corazón contento!
Por la actividad física que tienen y el gasto de energía constante, en la alimentación de los niños no debe faltar ningún grupo de alimentos, ya que cada uno tiene un aporte a su maduración y desarrollo, según explica el nutricionista de Clínica Reñaca, parte de Bupa, José Luis Riquelme, quien recomienda que, para que los niños mantengan cuerpo y mente sanos, su dieta debe incluir:
- Frutas y verduras, por su aporte en vitaminas.
- Lácteos, para el correcto crecimiento de huesos y dientes.
- Pescados y semillas, por su aporte en omega 3, el cual apoya su desarrollo cognitivo y salud cardiaca.
- Paltas y frutos secos, para el desarrollo y correcto funcionamiento del sistema hormonal.
- Carbohidratos y proteínas de buena calidad, porque son una importante fuente de energía.
Crea hábitos de sueño para su crecimiento
Para apoyar el crecimiento y desarrollo de los niños, es importante poner atención a las horas y calidad de su sueño, ya que las necesidades varían según su edad. Una guagua de un mes por ejemplo, puede dormir hasta 18 horas, no seguidas, para luego a partir del año, dormir 12 horas, incluyendo una siesta en el día.
¿Cómo apoyar su descanso? A continuación, la neuróloga pediátrica de IntegraMédica, parte de Bupa, Marisol Avendaño, recomienda:
- Antes de ir a dormir, comer liviano, tomar un baño corporal, usar ropa adecuada a la estación, contar con una habitación con luz baja, que haya silencio o música relajante. Los padres deben despedirse e irse, para que el sueño sea lo más grato posible.
- Que no utilicen aparatos tecnológicos para dormir. En el caso de que ocurran pesadillas recurrentes, hay que pedirle al menor que relate lo sucedido, para procesarlo y ayudar a superar el miedo que lo invade. El adulto debe contenerlo, acercarse a él, pero no cambiarlo de cama.
- Si se despiertan en la noche, hay que volver a acomodar al niño en su cama. No se debe intentar despertarlo y tampoco hablar del suceso, ya que al día siguiente no tendrá recuerdo de lo ocurrido.
¿Cómo apoyar el desarrollo del lenguaje?
A través del lenguaje, los niños comienzan a interactuar con su entorno, integrándose y comunicando sus necesidades. Para apoyarlos, el juego es una buena herramienta, ya que a través de la repetición e imitación, logran la emisión de sonidos diferentes. Para estimularlos, la fonoaudióloga de IntegraMédica, parte de Bupa, Pamela Saavedra, recomienda las siguientes actividades:
- Jugar con la lengua y labios. Realizando sonidos diferentes con letras como R, M, Ñ o vocales.
- Nombrar objetos comunes. Al indicar y nombrar objetos conocidos, alentamos a los niños a desarrollar su lenguaje. Es bueno repetir esto al realizar actividades comunes como bañarse y al comer, señalando los elementos que se utilizan.
- Escuchar a los niños. Cuando estos hablan hay que escucharlos, no interrumpirlos y dejar que se expresen a su ritmo, sin terminar sus frases.
- Leer cuentos. A través de esta actividad se estimula el interés por el lenguaje.
- Evitar las burlas y críticas. Cuando un niño pronuncia mal una palabra, el adulto no debe imitarla, sino que modelar el lenguaje, reemplazando la palabra por la correcta.
¡Tener mascotas les hace bien!
A través del juego, los animales impulsan a niños a dejar de lado actividades sedentarias como los videojuegos o ver televisión, incentivándolos a hacer deporte y relacionarse más con el ambiente que los rodea. Los beneficios más destacados que entrega la relación entre una mascota y los niños son:
- Responsabilidad: Estimula a los niños a hacerse cargo de algunas necesidades de su mascota como darle de comer o paseos. Los ayuda a conocer acerca del cuidado y amor hacia otro ser vivo, fomentando el desarrollo del sentido de responsabilidad y el cariño.
- Expresión de emociones: Para los niños que demuestran dificultad para expresar sus emociones, la relación con una mascota los ayuda a aprender a exteriorizar de manera libre sus sentimientos, aprendiendo a entregar afecto y desarrollar la paciencia.
- Sociabilización: Tener una mascota hace que los niños desarrollen una actitud positiva ante la vida, respetando a los demás y fortaleciendo la confianza en sí mismos.
- Actividad física: Las mascotas invitan a los niños a dejar el televisor de lado para salir a jugar, evitando el sedentarismo y el desarrollo de la obesidad.