¿Qué hacer si mi hijo cae y sufre un esguince o fractura?

Las caídas en niños son muy comunes, sobre todo al comenzar el año escolar, ya que aumenta su actividad en los recreos y clases de educación física, aumentando las posibilidades de sufrir una caída que genere un esguince o fractura en zonas comunes como tobillo y muñecas.

    Claudio Oses
    Contenido validado por Claudio Oses Jefe de Urgencia Clínica Bupa Santiago

Los niños se mantienen constantemente en actividad corriendo, saltando o jugando, por eso están más expuestos a resbalar, sufrir choques o caídas que pueden provocar un esguince o fractura, lesiones que deben ser atendidas de manera inmediata, para luego ser examinadas por un traumatólogo, especialista que determinará la gravedad del golpe.

Respecto a las zonas más afectadas por este tipo de lesiones, Claudio Oses, Jefe del Servicio de Urgencia de Clínica Bupa Santiago, indica que “los esguinces y fracturas más comunes son de tobillo y de muñeca. Generalmente ocurren en el colegio, en especial en el recreo y en las clases de educación física se produce un aumento de estos traumas”.

Luego de la caída o golpe, se deben realizar primeros auxilios para aliviar el dolor y poder transportar al niño a un servicio de urgencia, por eso el doctor recomienda:

  • Mantener inmóvil la zona del esguince o fractura, esto ayuda muchísimo para calmar el dolor.
  • Durante el traslado el pie o mano, debe permanecer lo más derecho posible, sin apoyar ni mover la extremidad afectada.
  • Si está autorizada por el apoderado, la enfermera escolar puede dar un analgésico o antinflamatorio al alumno accidentado.

Luego de recibir primeros auxilios, el doctor Oses indica que la pronta atención médica es esencial en las próximas horas luego del golpe o caída, porque “hay algunas lesiones que parecen muy simples, pero pueden ser fracturas más complejas que necesitan inmovilizaciones o cirugías especiales. Este tipo de diagnóstico no se puede determinar sin tomar una radiografía o ser evaluado por un médico de urgencia o traumatólogo”.

Sobre el tiempo de recuperación de este tipo de lesión en niños, depende del grado del esguince o fractura que haya sido diagnosticado, ya que la recuperación de una fractura es más lenta, de tres a cuatro semanas mínimo. Un esguince, en cambio, si es leve probablemente en una semana el niño podrá volver a realizar actividad física de bajo impacto.

Padres siempre atentos a los golpes de cabeza

En niños es muy habitual las caídas y golpes en la cabeza, cuando este tipo de lesión es de una intensidad mayor, puede generar minutos de inconciencia o producir una deformación importante en el cuero cabelludo. Se recomienda que este tipo de golpes sean evaluados en el servicio de urgencias, ya que el equipo médico buscará síntomas o signos que indiquen si existen consecuencias graves para la salud del niño.

“Si el niño luego de la caída persiste con mucho dolor de cabeza después del golpe o tiene un comportamiento que no es normal, hablando de manera incoherente o no se le entiende, si no puede mover bien algún lado del cuerpo como las manos o piernas, náuseas o vómitos, la recomendación es que los padres los lleven a urgencias para descartar complicaciones mayores después del golpe”.

Atención de urgencia tras una caída

Al ingresar un niño al servicio de urgencia de Clínica Bupa Santiago, es atendido por el personal de enfermería, quienes clasificarán la gravedad de la lesión, para luego ingresar a un espacio especial para los pacientes del Seguro Escolar, donde será evaluado por un traumatólogo o pediatra, de acuerdo al tipo de urgencia. Luego, se realiza una radiografía para evaluar la lesión e indicar el tratamiento a seguir.

“Los niños son pacientes que se recuperan más rápido, por eso es muy importante la pronta evaluación en un servicio de urgencia, por un traumatólogo que pueda ayudar a discernir si hay algo más grave o no, a veces ocurren caídas más pequeñas y los papás o profesores les dan menor importancia, pero es necesario consultar porque hay lesiones que si no se descubren al principio pueden llegar a ser permanentes”, indica el doctor Oses.

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